El presidente electo de Argentina, Javier Milei, ha adelantado su estrategia para combatir la inflación, que actualmente supera el 140 por ciento anual. Milei, conocido por sus posturas económicas liberales, anunció que su gobierno emprenderá una fuerte reforma del Estado, incluyendo privatizaciones, con el objetivo de «destruir» la inflación en un plazo de 18 a 24 meses.
En declaraciones radiales, Milei expresó su intención de transferir al sector privado todo lo que sea posible, mencionando específicamente a la petrolera estatal YPF y los medios de comunicación estatales como ejemplos de empresas que serían privatizadas. No obstante, destacó que dos sectores intocables serán educación y salud, que permanecerán bajo la jurisdicción de las provincias en el sistema federal.
«Vamos a arrancar primero con la reforma del Estado, poner en caja las cuentas públicas muy rápidamente», afirmó Milei, subrayando su compromiso con la estabilidad fiscal.
El presidente electo, quien asumirá el cargo el 10 de diciembre para un periodo de cuatro años, tiene como principales desafíos económicos la reducción de la inflación, el equilibrio de las cuentas públicas, la eliminación del control de cambio y la disminución del gasto público. Propone metas más ambiciosas que las del Fondo Monetario Internacional (FMI), con el cual Argentina mantiene un acuerdo de 44,000 millones de dólares desde 2018.
Milei también planea poner fin a los subsidios a los servicios públicos, eliminar impuestos a la exportación y saldar la deuda emitida por el Banco Central mediante bonos antes de abordar la cuestión del control de cambios.
En relación con el Banco Central, Milei reiteró su intención de eliminarlo, argumentando que «robar está mal» desde una perspectiva moral. Sobre la posible dolarización de la economía, Milei fue más ambiguo, afirmando que la elección de la moneda será decidida libremente por los argentinos después de cerrar el Banco Central.
El presidente electo advirtió que iniciará sus reformas de inmediato, argumentando que «no hay lugar para gradualismo, para tibiezas ni para medias tintas». Sin embargo, reconocía que requerirá un fuerte respaldo político y dependerá de alianzas debido a la distribución actual del Congreso, donde su partido, La Libertad Avanza, tiene una representación limitada. Aunque Milei recibió apoyo en el balotaje de figuras como Mauricio Macri, líder de Juntos por el Cambio, la coalición de centro-derecha, la decisión ha resquebrajado dicha coalición.