El hombre, que fue capturado tras resultar herido en medio de unos operativos realizados por el Ejército nacional en zona rural de Rioblanco, fue presentado ante un juez de control de garantías señalado de ser un presunto integrante del autodenominado Frente Ismael Ruiz de las disidencias de las Farc, con el que habría atacado a los representantes de una reconocida empresa de textiles y a la alcaldesa de Rioblanco, Elisabeth Barbosa, el pasado 5 de octubre.
Los hechos ocurrieron en el sector de Puerto Saldaña, en jurisdicción de Rioblanco, donde una estructura criminal disparó en contra de la comitiva de la Alcaldesa y los empresarios que hacían una visita en la zona por vía terrestre para promover un programa social con las comunidades del sur de Tolima y allí, integrantes del Ejército Nacional que acompañaban el recorrido reaccionaron dejando como saldo un herido.
En medio de la confrontación, Gilberto Guegia Díaz, alias El Topo fue encontrado en poder de un fusil calibre 5.56 mm con culata retráctil, un proveedor con capacidad para 30 cartuchos y un revólver calibre 38 mm con el que habría disparado contra la Mandataria y los empresarios, pero también contra el Ejército que reaccionó, por lo que fue auxiliado por los uniformados que lo trasladaron a un centro asistencial, donde permaneció varios días hospitalizado y una vez fue dado de alta, lo presentaron ante los juzgados donde le imputaron los delitos de concierto para delinquir con fines de homicidio, homicidio en grado de tentativa; fabricación, tráfico y porte de armas, municiones de uso restringido, de uso privativo de las Fuerzas Armadas o explosivos; y fabricación, tráfico, porte o tenencia de armas de fuego, accesorios, partes o municiones.
Los elementos de prueba dan cuenta de qué alias Topo se habría vinculado al autodenominado Frente Ismael Ruiz hace cinco meses y estaría bajo las órdenes de alias Capetillo, señalado cabecilla de este grupo armado ilegal, quien orquestó el ataque a la Alcaldesa de Rioblanco, en un hecho que inicialmente fue negado por el Secretario del Interior del Tolima, quien dijo que no se trató de una acción contra la Mandataria, sino una retaliación contra el Ejército por las operaciones en la zona, pero la Fiscalía desvirtúa esta versión.