Aseguran los afectados que están cansados de llamar al IBAL y que no se les brinda solución a la problemática.
Según lo manifestado por varios habitantes del barrio Rincón de Piedra Pintada, los cortes de agua son constantes e incluso han llegado a tener suspensiones cercanas a los 5 días del vital líquido.
Afirman algunos de ellos que la situación es tan delicada, llegando al punto de tener que enviar a sus hijos al colegio sin poder bañarse o sin haber podido lavar sus uniformes.
Llama la atención, que al momento de reportar este problema a las líneas de atención del IBAL, solamente les entreguen un radicado de la denuncia e incluso les insinúan que deben ir personalmente a las oficinas de la empresa en el barrio la Pola para que sean los ingenieros los que les den solución inmediata a este inconveniente.