La denuncia la realiza una de las líderes del sector, indicando que con la llegada de las lluvias se puede presentar una emergencia más delicada.
Norma Riveros, líder de la comuna 12 en la ciudad de Ibagué y quién se comunicó en el centro regional de denuncias ciudadanas de La Voz del Pueblo, mostró su preocupación por el riesgo de caída inminente de una piedra de gran tamaño sobre una residencia en el sector de la Cristalina, zona rural de la capital del Tolima.
De acuerdo a lo que manifiesta la mujer, desde el mes de abril aproximadamente, luego de una primera emergencia ocasionada por otra piedra que cayó cerca a una vivienda, se dio aviso a las autoridades municipales sobre el peligro inminente en la caída de un segundo objeto de similares características sobre una vivienda.
Manifestó que hasta el sitio llegaron funcionarios de la Secretaría de Ambiente y Gestión del Riesgo, haciendo especial énfasis en el director de esta dependencia de la administración municipal Félix Salgado, asegurando que a la fecha no se ha vuelto a ver la presencia de la administración local en el sector.
¿Qué responde Félix Salgado?
Ante esta situación, este equipo periodístico se comunicó con el director de Gestión del Riesgo Municipal, Félix Salgado, quién aseguró, la situación que se presenta en el sector de la Cristalina no se ha podido solucionar, no por falta de intención de la administración, sino por temas contractuales.
Afirma que una vez recibida la denuncia por parte de la comunidad, se inició el proceso y se abrió un proceso de licitación, para poder contratar los servicios de profesionales en la remoción de este tipo de elementos; sin embargo, el mismo ha sido declarado desierto en dos ocasiones, lo que ha impedido intervenir y prevenir una mayor emergencia.
Resaltó que nuevamente se abre un proceso de licitación, pero se deberán esperar 20 días para definir si surge algún proponente o se declara nuevamente desierto.
Según lo manifiesta la señora Riveros, en el sector la familia que reside en la edificación en riesgo, no se encuentra en el lugar por temor a lo que pueda ocurrir, ante una eventual emergencia que se originó por las lluvias.