En el marco del Día Mundial contra el Trabajo Infantil, Comfenalco Tolima, en cabeza de su Director Administrativo, Alexander Barragán Alfaro, reafirma su compromiso con la protección y el bienestar de la niñez vulnerable del departamento. Con el lanzamiento del programa “Erradicación del Trabajo Infantil – 2025”, la Caja de Compensación continúa su labor de más de 18 años en la defensa de los derechos de niños, niñas y adolescentes.
Este programa, desarrollado en convenio con la Alcaldía de Ibagué y en alianza con la Fundación Centro de Formación para la Paz, ha beneficiado a más de 1.800 niños y jóvenes en situación de vulnerabilidad, víctimas del conflicto armado, población migrante, personas con discapacidad, estudiantes con talentos excepcionales y aquellos en riesgo de trabajo infantil.
Espacios seguros, artísticos y llenos de esperanza
Durante casi dos décadas, el programa ha impactado positivamente en las plazas de mercado El Jardín, La 21, La 14 y Chapicentro, así como en las veredas CAY y La Cascada del Cañón del Combeima. Su enfoque integral fomenta el buen uso del tiempo libre, reduce la deserción escolar y promueve el desarrollo personal y artístico de los menores.
En 2025, el programa se fortalece con un nuevo espacio en el salón social del centro comercial Chapicentro, donde los beneficiarios podrán participar en actividades formativas centradas en la música, rescatando la tradición cultural de nuestra Ciudad Musical. Este enfoque artístico no solo enriquece su formación, sino que también les ofrece una alternativa de proyecto de vida.
Alianzas que construyen futuro
Este esfuerzo no sería posible sin el respaldo de aliados estratégicos como la Fundación Centro Formación para la Paz, Secretaría de Desarrollo Social Comunitario, el Ministerio del Trabajo y el ICBF, quienes han confiado en la labor de la primera Caja de Compensación del Tolima. Gracias a estas alianzas, se garantiza un entorno seguro, educativo y recreativo para hijos de trabajadores de las plazas de mercado y de zonas rurales del municipio.
Mientras sus padres trabajan, los niños y niñas disfrutan de un espacio protegido, donde aprenden, se expresan y reciben un refrigerio en cada encuentro, brindando así tranquilidad a sus familias y fortaleciendo el tejido social.
