Un cuadro que estuvo colgado durante más de cincuenta años en el hogar de una familia italiana podría ser una obra original de Pablo Picasso, lo que lo convertiría en un hallazgo invaluable en el mundo del arte.
En un sorprendente giro del destino, una pareja que ignoraba el valor de un cuadro en su sala de estar ha despertado el interés del mercado artístico. Este lienzo, encontrado en un sótano de Capri en los años sesenta, lleva la firma de Picasso y representa a su musa Dora Maar. Tras un análisis forense, la experta Cinzia Altieri confirmó que la firma es auténtica, elevando las expectativas de su valor a hasta 12 millones de euros.
No obstante, la autenticidad del cuadro aún debe ser validada por la Administración Picasso, encargada de certificar las obras del artista. Esta entidad, conocida por su riguroso proceso de evaluación, ha generado gran expectativa en el mercado del arte mientras los coleccionistas esperan una respuesta sobre el destino de la obra.
Si la validación resulta positiva, el cuadro no solo transformará la vida de sus actuales propietarios, sino que también podría agregar un nuevo capítulo en la prolífica historia de Picasso, quien dejó un legado de más de 14,000 obras. El misterio sobre otras piezas ocultas en colecciones privadas continúa atrayendo la atención del público y los expertos por igual.
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