Expertos advierten sobre la proximidad de un racionamiento eléctrico en Colombia debido a la crítica situación de los embalses y la dependencia del país en la generación hídrica y térmica. El exministro de Minas y Energía, Amylkar Acosta, señala que la amenaza se agrava por la fragilidad estructural del sistema eléctrico y el atraso en proyectos de energías renovables.
Según Acosta, el 68% de la generación eléctrica en Colombia proviene de fuentes hídricas, lo que hace al país vulnerable a fenómenos climáticos como El Niño. La capacidad de regulación de los embalses es limitada, con la mayoría de ellos con apenas cuatro meses de reserva, lo que aumenta el riesgo de racionamiento eléctrico.
La situación se agrava por la falta de infraestructura de transmisión, especialmente en regiones como la Caribe y Cundinamarca, donde la demanda supera la capacidad de las líneas de transmisión. Acosta destaca el retraso en proyectos de energía renovable, como los parques eólicos en La Guajira, que podrían haber mitigado la crisis actual.
El exministro también critica la propuesta del Gobierno de negociar la importación de gas desde Venezuela, argumentando que no es viable políticamente ni logísticamente. Además, señala que medidas como intervenir el precio en bolsa no resolverán el problema tarifario y podrían trasladar mayores costos a los usuarios.
Ante este panorama, el Centro Nacional de Operaciones advierte sobre la necesidad de tomar medidas urgentes para evitar un racionamiento eléctrico. Acosta insta al Gobierno a reconsiderar políticas energéticas y priorizar la diversificación de la matriz eléctrica para garantizar la seguridad energética del país.