Por estos días suele tomar fuerza la discusión que determinará el salario mínimo para los trabajadores para el año siguiente.
Sin embargo, expertos economistas señalan que si bien este incremento marca así mismo el aumento del costo de vida, no obstante, el salario mínimo por sí mismo, no es un determinante de ingresos para todos los trabajadores de Ibagué.
“Hay una falacia en torno a que el salario mínimo atiende a la mayoría de los colombianos. No, en el país más del 55 % de los trabajadores se encuentran por fuera del empleo formal”, indicó el director del Instituto de Desarrollo Regional de la Universidad de Ibagué, Jaime Eduardo Reyes.
De igual manera señaló que la inversión privada hace que las empresas produzcan más y requieran de más mano de obra, sin embargo, un aumento de salario alto podría derivar en la pérdida de empleos formales o la no generación de nuevos puestos de trabajo.
El economista sostuvo que un mayor salario mínimo no desencadenaría precisamente en un proceso de reactivación económica para la ciudad, ya que esta se daría principalmente de un incremento en la inversión privada.
Según lo explicado por Reyes para el caso concreto de Ibagué, si se quisiera atraer a inversionistas a la ciudad, se deberían implementar políticas que propicien las condiciones para los empresarios, como reducciones en costos laborales y de producción.