Ante el aumento de casos de extorsión en todo el país y en diversos municipios de Tolima, incluida su capital, Ibagué, la Secretaría del Interior de Tolima, en colaboración con las autoridades departamentales, ha resaltado los métodos más comunes empleados por los extorsionistas para coaccionar a las víctimas a pagar sumas de dinero a través de intimidación.
El capitán Yemerson Rodríguez, Subcomandante de la unidad Gaula de la Policía de Tolima, señaló que la táctica de «falso servicio» ha aumentado su uso en las últimas semanas.
«La modalidad de falso servicio implica que los delincuentes se ponen en contacto con las víctimas bajo la pretensión de contratar servicios de transporte, asistencia en mudanzas, ayuda técnica agrícola y más. Las víctimas son atraídas a zonas rurales con problemas de comunicación, donde son obligadas a depositar una suma de dinero especificada. En estos casos, se recomienda encarecidamente verificar y ser cauteloso. Lo más importante, por seguridad, es compartir siempre tu ubicación con los miembros de la familia a través de tu teléfono móvil», enfatizó.
Cuidado con las Redes Sociales
Los extorsionistas también están aprovechando las actualizaciones constantes compartidas en diversas plataformas de redes sociales, como información familiar, estados y lugares visitados con frecuencia.
«Es crucial restringir la información que compartes, preferiblemente a través de perfiles privados. De lo contrario, las personas se vuelven vulnerables a lo que llamamos ingeniería social. Esto implica que los delincuentes rastrean las plataformas y redes sociales de posibles víctimas para intimidar, incitar el pánico y presionar el pago de la extorsión«, explicó.
El Subcomandante de la unidad Gaula de la Policía de Tolima resaltó la importancia de hacer denuncias de manera oportuna, de preferencia a la línea 165. En este sentido, ofreció recomendaciones para las personas que se convierten en víctimas de extorsión.
«Mantener la calma es fundamental. Una vez contactado por los delincuentes, cuelga inmediatamente y comunica con la línea de ayuda al 165. Si es posible, graba la llamada en tu teléfono móvil. Esto ayuda a rastrear y seguir la comunicación para determinar su origen», añadió.
Según las autoridades, una parte significativa de las llamadas de extorsión se originan en diversos centros penitenciarios del país, no limitados únicamente a la cárcel de Picaleña, y un porcentaje considerable proviene de elementos delictivos comunes.