El sujeto orquestó el rapto de la niña, la vigiló previamente y sometió a toda clase de vejámenes sexuales, tortura y posterior asesinato
El Juez Quinto penal con control de función de garantías legalizó la captura de José Wilson Barreto Rodríguez, de 51 años, el hombre señalado como el autor intelectual del crimen de Dana Sofía y su tío Ricardo Olaya, de 22 años de edad y avaló la imputación de los delitos de feminicidio agravado, Homicidio agravado y destrucción y ocultamiento de elemento material probatorio, los cuales no aceptó.
De acuerdo con el ente investigador, el tío de la niña de 9 años de edad, planeó con varios días de anticipación lo que ocurrió ese fatídico 8 de febrero en un inquilinato del barrio San Pedro Alejandrino y así se pudo corroborar por medio de la información recaudada de los teléfonos celulares que se hallaron en la escena del crimen, pese al intento de Jose Wilson Barreto de destruirlos.
Las indagaciones de la comisión especial de la Dijín y el CTI permitieron establecer que Ricardo Olaya, tío de la menor, en compañía de su amigo Mauricio Barreto, y el capturado José Wilson Barreto Rodríguez, estuvieron orquestando el secuestro de la niña y según el material probatorio que lograron recaudar, se pudo constatar que le hicieron seguimiento con fotografías y videos de la pequeña a la que le decían “La Princesa”.
Ricardo Olaya, tío de la menor, finalmente decidió llevar a la niña con él y sus cómplices, saliendo desde el barrio Jardín, donde videos de cámaras de seguridad permitieron determinar que el hoy imputado fue quien lo recogió en el taxi y así lo comprobó el conductor del vehículo quien lo identificó plenamente, cuya identificación se corroboró con los videos de seguridad de un motel ubicado muy cerca del lugar donde ocurrió el asesinato.
La niña fue ingresada desde por la mañana al inquilinato y sometida a toda clase de vejámenes sexuales que incluyeron prácticas sadomasoquistas que los padres e hijo, Jose Wilson Barreto Rodríguez y Mauricio Barreto, también practicaron con el tío de la menor.
Finalmente, las autoridades presumen que al ver toda la tortura a la que estaba siendo sometida, la pequeña intentó detener al padre e hijo y fue cuando decidieron matarlo, causándole más de una docena de heridas con un arma blanca y a la menor, por lo menos 8 lesiones que le quitaron la vida y al ver que llegó la Policía al lugar, Mauricio Barreto decidió suicidarse tomándose una alta dosis de veneno.
De acuerdo con la Fiscalía General de la Nación, los tres implicados en el asunto planearon y orquestaron todo lo que ocurrió con la menor y pidió la medida de aseguramiento intramural que fue avalada por la Procuraduría que consideró a Jose Wilson Barreto Rodríguez, un peligro para la sociedad.