Fernando Cano oriundo de Chaparral Tolima, se encontraba prestando servicio militar en Ucrania en medio del devastador conflicto que ha sacudido a ese país.
Según versiones preliminares, resultó gravemente herido durante un enfrentamiento armado; sin embargo, aún no se han revelado detalles oficiales sobre el lugar exacto, las circunstancias del combate ni la unidad a la que pertenecía.
Entre la desolación y la tristeza, la comunidad chaparraluna lamenta el fallecimiento de Cano, un joven que partió al exterior con la esperanza de mejorar su condición de vida y, tras un inesperado giro del destino, falleció en tierras ucranianas tras la fuerte arremetida en las últimas semanas del país vecino, Rusia.
Familia y amigos de Fernando enfrentan una mezcla de orgullo y melancolía, por un lado, por el valor demostrado tras la búsqueda de mejores condiciones económicas para sus seres queridos, y una tristeza insoportable por la pérdida de su vida. El joven Cano había viajado con la ilusión de mejorar las circunstancias económicas de su hogar, encontrando en el servicio militar una posibilidad de superación, una decisión impulsada por el amor familiar y también por la falta de oportunidades en esta parte.
Hoy, su cuerpo descansa aún en territorio ucraniano mientras se llevan a cabo los trámites diplomáticos y legales para su repatriación. En medio del desconcierto, la Cancillería colombiana, en coordinación con las autoridades ucranianas, trabaja con discreción y diligencia, afinando la verificación de los hechos y brindando acompañamiento a la familia en este doloroso proceso.
Esta tragedia no es un caso aislado. La Cancillería colombiana ha confirmado que 64 connacionales han perdido la vida durante los tres años del conflicto en Ucrania. La mayoría eran exintegrantes de las Fuerzas Militares o la Policía, atraídos por promesas de ingresos elevados difundidas incluso a través de redes sociales. De esos 64 fallecidos, 57 fueron repatriados, uno fue enterrado en Ucrania, y seis cuerpos aún están en proceso de traslado a Colombia. Además, 122 connacionales permanecen desaparecidos en combate, una cifra que sigue generando angustia entre sus familiares.











