Los trabajos para desactivar este tipo de artefactos exclusivos continúan adelantándose en algunos puntos del departamento y la región.
El Mayor Alex Alfonso Torres Aruela, segundo comandante del Batallón de Ingenieros de Desminado Humanitario N°2, compartió los logros alcanzados hasta ahora: “Hemos despejado más de 500.000 m² en Chaparral y más de 570.000 m² en Planadas, utilizando técnicas manuales, mecánicas y caninas para eliminar numerosas minas y artefactos explosivos.”
Este esfuerzo forma parte de un plan conjunto con las autoridades locales para salvaguardar a las comunidades y prevenir tragedias como la que ocurrió en San Vicente del Caguán, donde una niña fue herida por una mina antipersonal. “Estamos implementando programas educativos sobre el riesgo de minas para concienciar a hombres, mujeres, niños y niñas, para que no se conviertan en víctimas de estos dispositivos”, añadió el Mayor Torres.
Las actividades de desminado no solo son un alivio para las comunidades afectadas, sino que también representan una oportunidad para el desarrollo en las zonas rurales, liberando tierras para actividades agrícolas y permitiendo el regreso seguro de los habitantes.
La Gobernación del Tolima reitera su compromiso con la protección de los derechos de las comunidades y el bienestar de los territorios impactados por el conflicto armado. Estas operaciones continúan como parte de los esfuerzos conjuntos para la recuperación y estabilización del sur del Tolima.
