La implementación de la facturación electrónica en Colombia avanza, y la Dian ha cerrado 119 establecimientos de comercio en 2024 por incumplir esta obligación. Entre los afectados está el famoso piqueteadero de Doña Segunda en Bogotá, lo que ha generado incertidumbre entre los comerciantes.
Luis Hernando Valero, subdirector de Facturación Electrónica de la Dian, explicó que desde 2019 más de 1′183.000 facturadores electrónicos transmiten cerca de 24 millones de transacciones diarias a la Dian. Valero aclaró que todas las personas jurídicas están obligadas a facturar electrónicamente, excepto las entidades financieras. Las personas naturales también deben cumplir esta obligación si sus ingresos brutos superan 3.500 UVT ($164.727.500) o si son contratistas del estado con ingresos superiores a 4.000 UVT.
La Dian señala que la falta de cumplimiento en la expedición de facturas electrónicas puede resultar en sanciones económicas del 5% de los ingresos operacionales o el cierre del establecimiento comercial. La facturación electrónica reduce costos, regula el tejido empresarial, intensifica el uso de la tecnología y mejora el control financiero de las empresas.