En su segundo día consecutivo, el paro de los conductores de buseta tiene preocupados a cientos de ibaguereños que ven cómo su rutina diaria se convierte en una auténtica pesadilla, aproximadamente una decena de vehículos de transporte público se apostaron frente a la Alcaldía, y sus conductores encadenados clamando la presencia de la alcaldesa Johana Ximena Aranda.
Los barrios y veredas de Ibagué, desde las zonas urbanas hasta los rincones más apartados se encuentra en su malla vial completamente olvidada y sin mantenimiento, los conductores exigen soluciones urgentes por parte de la administración municipal para la garantía en la prestación del servicio a más de 128.000 personas utilizan el servicio de transporte público tipo buseta en Ibagué según cifras oficiales recientes
«Hemos intentado bajo todos los medios y formas tener un canal de comunicación con la señora alcaldesa Johana Aranda, sin embargo no nos ha querido dar la cara hasta la fecha, necesitamos un gerente en propiedad del SETP que brinde garantías para todos los del gremio y no favorezca algunos, han querido desdibujar nuestra movilización con mentiras pero aquí seguiremos en pie de lucha hasta donde nuestros cuerpos resistan, en la alcaldía no nos han permitido ni el ingreso al baño, lo que es un mensaje claro que no les interesa el sector de busetas ni las personas que movilizan en el transporte público a la comunidad ibaguereña» indicó Miguel Ángel Caro, manifestante y representante del sector busetero de Ibagué.











