En un trágico suceso que ha conmocionado a la comunidad de Bogotá, la pequeña Jesslin Guerrero Medina, de apenas 4 años, fue asesinada a tiros en el barrio Ciudad Montes, mientras su madre, Yina Catherine Medina, de 32 años, resultó gravemente herida. Los sicarios que perpetraron el ataque, que ocurrió a escasos metros de su hogar, se dieron a la fuga en una motocicleta azul por la carrera 50.
Según las autoridades, el ataque fue premeditado, ya que los agresores estaban esperando a la familia en el momento en que salieron de su casa. Se ha confirmado que el vehículo fue seguido antes de que los atacantes dispararan en al menos diez ocasiones. A pesar de la rápida respuesta de los testigos, la pequeña Jesslin no sobrevivió al impacto de una bala que le alcanzó en la cabeza.
Yina Catherine Medina, quien permanece en estado crítico en una unidad de cuidados intensivos debido a múltiples heridas en el abdomen y extremidades, se encuentra bajo atención médica urgente. Los informes indican que existe la posibilidad de que la mujer pierda una de sus extremidades debido a la gravedad de sus lesiones.
Un testigo del ataque relató momentos de pánico, afirmando haber escuchado entre seis y siete disparos. «Cuando fuimos a ver, vimos a una señora llamando a la Policía con la mano», comentó el testigo, quien también intentó ayudar a la familia.
Las autoridades han descartado que el ataque se tratara de un robo y continúan su búsqueda por los responsables del crimen. Según la investigación, los sicarios dispararon desde el costado derecho del vehículo, donde se encontraba sentada la niña. Las imágenes de las cámaras de seguridad han sido clave para identificar a los atacantes, quienes se desplazaban en una motocicleta de cilindraje entre 125 y 200 centímetros cúbicos.
Este trágico episodio ha dejado una profunda herida en la comunidad y ha generado un llamado urgente a las autoridades para mejorar la seguridad en las calles de Bogotá.