Hicieron ir hasta un sector rural de la capital tolimense, a una enfermera, donde le dijeron que estaba secuestrada, llamaron a sus familiares, les exigieron dinero y por fortuna, puso en conocimiento del Gaula la situación, así que no entregaron dinero.
Un nuevo caso de ‘falso servicio’ ocurrió durante el fin de semana en Ibagué a una enfermera, quien fue contactada para, presuntamente, cuidar a unos adultos mayores en zona rural de la capital tolimense.
La Voz del Pueblo habló con una familiar de la víctima de esta modalidad de extorsión, en la cual, hicieron ir a la mujer hasta una vivienda abandonada en zona rural, y estando en el punto, le hicieron creer que estaba secuestrada por las Farc, aunque no tuvo contacto personal. La mujer estaba acompañada por una persona, un hombre, quien hacía los recorridos.

“Una familiar acudió a un sitio donde había sido citada, aparentemente, para hacer los cuidados de unas personas de enfermos o de la tercera edad. Con la persona que le hace los recorridos llegan al punto y la verdad, donde está la ubicación es una casa abandonada. Por lo cual deciden cómo avanzar para echar marcha hacia atrás, pero durante el proceso en el camino ella envió unas evidencias de que ya iba hacia allá. Cuando ella llegó al punto recibieron una llamada, donde le dijeron que en ese momento estaban siendo observados y secuestrados por las Farc”, contó la allegada.
Una vez en el sitio, le pidieron el número celular de una familiar, en ese caso, brindó el número de la mamá, quien recibió una llamada en la que le informaron que estaba siendo vigilada, generando miedo y confusión.
Contó la mujer, que en el transcurso de la llamada, los extorsionistas, primero, se hicieron pasar por la Policía, alegando que la situación requería la entrega de dinero porque a su tía la habían capturado por el hurto de unos medicamentos. Paralelamente, intentaron contactar a familiares de otra víctima, el conductor de la moto, con solicitudes similares.

Esta situación causó extrañeza por parte de la allegada, quien sospechó algo irregular, pues, las autoridades no exigirán dinero por no capturar a una persona, así que decidió llamar a la Policía, y la contactaron con una persona del Gaula, quien la asesoró.
La Policía Nacional organizó un operativo para verificar la seguridad de las personas en el lugar y asegurar su integridad. Durante este tiempo, los extorsionadores continuaron contactando a los afectados para presionar el pago.

Se resalta que el operativo policial logró intervenir y trasladar a la víctima a un lugar seguro. Además, algunos de los involucrados buscaron atención médica en un centro de urgencias debido al estrés y la afectación emocional derivada del incidente.
Recomendaciones cuando recibe este tipo de propuestas:
Si se reciben llamadas sospechosas de este tipo, no proporcionar información personal ni responder a las demandas.
Comunicarse de inmediato con las autoridades para reportar el hecho.
Evitar acudir a lugares desconocidos sin compañía ni verificar previamente la veracidad de las citas o solicitudes.
