En un sorprendente giro de eventos, el gobierno venezolano ha decidido cerrar sus fronteras con Colombia desde las 5:00 a.m. de este viernes hasta las 5:00 a.m. del próximo lunes, bloqueando el paso con contenedores en los puentes que conectan con Cúcuta. Esta medida ha desatado caos e incertidumbre en la región, especialmente en el puente internacional Francisco de Paula Santander, que une Cúcuta con Pedro María Ureña.
Desde la 1:00 a.m., las autoridades venezolanas comenzaron a instalar los contenedores, lo que ha generado una completa obstrucción de la visibilidad y el acceso hacia territorio venezolano. Residentes de la zona, sorprendidos por la repentina decisión, han expresado su frustración. Un habitante local comentó a Blu Radio: “Para nosotros fue algo inesperado, pues este Gobierno hace lo que le da la gana. Mira cómo amaneció esto sin previo aviso”.
La medida ha impactado directamente al comercio en Cúcuta, provocando el descontento de la población que depende de la actividad comercial en la frontera. “La gente deja de trabajar, esto es injusto. ¿Entonces, quién sufre? Somos nosotros los del pueblo”, afirmó el residente.
Además, la situación se ve agravada por la militarización de la frontera, donde el Ejército ha incrementado su presencia, incluso en los pasos irregulares. “La frontera venezolana está militarizada totalmente. Y las trochas también están full militarizadas del Ejército”, denunció.
El cierre de la frontera contradice las declaraciones previas de Freddy Bernal, gobernador del Táchira y aliado del gobierno de Nicolás Maduro, quien había asegurado que no se cerraría el paso. Sin embargo, en un inesperado cambio de discurso, Bernal justificó la medida como una respuesta a “una conspiración internacional para perturbar la paz de los venezolanos, especialmente en esta zona de frontera”. La situación sigue desarrollándose, y la incertidumbre persiste entre los habitantes de ambos lados de la frontera.