El caso fue dado a conocer en nuestro Centro Regional de Denuncias Ciudadanas durante las celebraciones de fin de año en la capital del Tolima.
La noche del 29 de diciembre, Rosalba Burgos, ingresó por la Unidad de Urgencias de la Clínica Medicadiz de la ciudad de Ibagué, esto ante varias complicaciones de salud presentadas por una trombosis en su cadera, diagnóstico que se habría dado de manera tardía.
La mujer, que llegó en compañía de su esposo, Fernando Jiménez, comenzó a presentar molestias desde tempranas horas, cuando realizaba una caminata en la cancha del barrio Tierra Firme, sector donde residía.
Según lo que índico Fernando, ingresaron a las 10 de la noche del 29 de diciembre al centro asistencial, la paciente fue revisada por una doctora sobre las 12:30 de la madrugada del 30 de diciembre, siendo allí, donde ante las manifestaciones de preocupación de su acompañante, que la profesional luego de varios minutos le diagnosticó un trombo en su cadera, por lo que se le ordenó el suministro de medicamento y la toma de unos exámenes.
Ante esto, la señora Burgos, se dirigió hacia una sala indicada por la profesional, donde luego de casi media hora murió prácticamente sentada en una silla de ruedas, esperando ser atendida.
Don Fernando, afirma que la atención médica, en el caso de Rosalba, fue tardía, Afirman que, al observar el mal estado de la paciente, pidió la ayuda de enfermeras y personal de la institución, misma que solo habrían prestado al notar que esta persona ´presentaba un paro cardiorrespiratorio.
En ese instante, la ahora occisa, fue ingresada para recibir proceso de reanimación, mismo que no dio resultado, confirmándose la muerte de esta persona.
Mientras Don Fernando asegura que su esposa murió sentada en la silla de ruedas, en el momento de reportarse su deceso, los médicos indicaron haber realizado lo posible por salvar la vida de Doña Rosalba.
La familia de la mujer afiliada a la Nueva EPS, indicó en entrevista en este medio de comunicación, que su familiar fue víctima de negligencia médica, ya que esperó cerca de tres horas para ser atendida, pero murió sin recibir dicha atención.
Como dato adicional, días antes del 24 de diciembre, la misma mujer asistió a este lugar por problemas estomacales y de igual manera se demoró la atención. Debió ser su esposo que con un medicamento en la droguería logró solucionar este inconveniente.
Don Fernando hace un llamado de atención a las autoridades en Ibagué, para que este tipo de casos no se vuelvan a presentar, esto para evitar que más pacientes pierdan la vida, como Doña Rosalba, quien en el próximo mes de abril cumpliría 80 años de vida.