En un sorprendente giro de los acontecimientos, el Ejército de Colombia se enfrenta a un nuevo desafío con la reaparición del Ejército Popular de Liberación (EPL) en Norte de Santander, un grupo que había permanecido inactivo desde 2018. En un reciente incidente, miembros del EPL bloquearon durante varias horas la vía que conecta Ocaña, en Norte de Santander, con Aguachica, en Cesar, donde también marcaron vehículos, generando alarma en la población local.
Este bloqueo se produjo apenas 12 horas después de que el Ejército lanzara la campaña «Viaje Seguro» en la región, lo que plantea interrogantes sobre la efectividad de las estrategias de seguridad implementadas. Desde su división en dos facciones en 2019 y su reclasificación en 2021 como un grupo delincuencial organizado de menor importancia por el Ministerio de Defensa, el EPL parecía haber desaparecido del panorama del conflicto armado en el país.
Sin embargo, en los últimos meses, se ha intensificado la presencia de estos grupos guerrilleros en áreas donde se creía que habían sido erradicados. En noviembre pasado, varios hogares y comercios en los corregimientos de Guamalito y Aspasica, pertenecientes a los municipios de El Carmen y La Playa de Belén, amanecieron con letreros alusivos al EPL, indicando un resurgimiento preocupante de esta organización.
Las autoridades locales y el Ejército se encuentran en alerta ante esta situación, que podría complicar la seguridad y la estabilidad en una región que ha sido testigo de múltiples enfrentamientos entre grupos armados. La comunidad espera respuestas efectivas para contrarrestar esta nueva amenaza y garantizar la tranquilidad en las vías de acceso.