En un encuentro que pasará a la historia como uno de los más grises de las eliminatorias mundialistas, la Selección Colombia, dirigida por el argentino Néstor Lorenzo, sufrió una amarga derrota 0-1 contra Ecuador el martes 19 de noviembre. El gol del delantero Énner Valencia a los 7 minutos selló el destino del partido, marcado por una falta de creatividad y un juego apagado por parte del equipo local.
La situación fue tan desalentadora que las cámaras de televisión captaron a una hincha en el estadio Metropolitano de Barranquilla, con los ojos cerrados, evidenciando el aburrimiento que generó la pobre actuación del equipo colombiano. A pesar de la expulsión del defensor ecuatoriano Piero Hincapié, que dejó a su equipo con 10 jugadores, la Selección Colombia no logró encontrar el camino del gol y se mostró impotente ante un rival que celebró su primera victoria en suelo colombiano en 59 años.
Con esta derrota, los colombianos se quedaron con 19 puntos y acumulando un pesaroso balance tras una reciente derrota también ante Uruguay (3-2) el pasado 15 de noviembre. La afición, decepcionada, quedó atrapada entre la tristeza del resultado y la somnolencia que propagó el juego del equipo.
