Una usuaria señaló que quien manejaba la buseta les aseguró que no bajaba hacia el peaje, los dejó en la Hacienda La Miel y minutos después lo captaron en el sector de Buenos Aires. El servicio habría desmejorado y sus quejas no las estarían escuchando.
Una usuaria del servicio de la ruta 28 de Ibagué, la cual debe bajar hasta el Peaje de Gualanday, puso en conocimiento que el servicio ha desmejorado y durante el fin de semana fue víctima de un conductor que les dijo a los pasajeros que los dejaba en la Hacienda La Miel.
Así las cosas, el conductor no estaría cumpliendo con el recorrido completo, y lo que vivió el viernes anterior, 15 de noviembre, cuando se disponía a llegar a su casa, no sería la primera vez que sucede.
“La buseta 28 no hace el recorrido hasta la última avenida. El señor que estaba en la buseta decía que había la ruta hasta las 6:00 de la tarde y que él podía hacer lo que quería. Yo me vine en la buseta hasta La Miel y la gente, otra pareja que venía para acá, se quedó en Picaleña, o sea, se quedaron a dormir en Ibagué porque el señor no bajaba y transportaba para acá. No se consigue y, si se consigue, es muy caro, muy costoso”, contó la denunciante.
Según la afectada, tuvo que contratar un transporte particular por 15,000 pesos para llegar a su destino. Además, mencionó que en ocasiones los conductores detienen sus recorridos para atender asuntos personales, dejando a los usuarios sin alternativas para movilizarse.
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“Me quedé en La Miel y conseguí un particular que no bajó hasta allá, me cobró 15.000 pesos. Y el señor estaba en Buenos Aires, ahí estaba la buseta. Él venía con una acompañante. Estaba en uno de los negocios, estaba parqueado ahí. Ya en ese momento el pensado mío fue arrimar a la Policía, pero el señor ya daba la vuelta. Ahí se le tomó el video para que quedara evidencia de que no es mentira lo que estamos diciendo, estamos perdiendo mucho por el transporte”, contó la afectada.
Agregó que ya han sostenido diferentes reuniones, pero hasta el momento sigue la problemática que afecta a estudiantes y personas que trabajan en Ibagué, y que algunos se han visto obligados a dirigirse a la Terminal de Transportes o contratar transporte hasta el lugar.
“Tienen que solucionar el transporte de otra manera porque la buseta no baja hasta acá. Los señores, en ocasiones, son hasta groseros. Otro problema que tenemos es que ellos vienen y lo hacen cambiar a uno de buseta, viene uno muchas veces con maleta, con mercado, esto lo hace más que todo de noche. Viene gente de la tercera edad, señoras embarazadas, señoras con niños con maletas, y los señores paran por ahí y le dicen a uno que se baje y se cambie de buseta”, refirió.
Y enfatizó: “Estamos muy mal con el transporte acá, ojalá ustedes nos puedan colaborar, nos puedan ayudar porque nosotros venimos con este problema ya hace rato. El transporte fue bueno cuando lo tuvo Tures Tolima y cumplía, eran señores que cumplieron con el horario y todo eso. Pero lo que hace entró esa norma que pusieron, que vienen diferentes empresas, esto está muy delicado en el transporte para acá”, concluyó la mujer.