La preocupación y el desasosiego reinan en Cartagena tras la alarmante desaparición de dos ciudadanos cartageneros, Cristian Guerrero González y Carlos Colón Campo, quienes se encontraban en San Luis Potosí, México, realizando labores para la multinacional Alfran.
Desde el pasado 23 de octubre, sus familias no han tenido noticias de ellos, lo que ha llevado a sus seres queridos a encender las alarmas y solicitar urgentemente la intervención de las autoridades.
De acuerdo con el relato de Shadia Cuesta, esposa de Cristian, el último contacto con su pareja se produjo a las 11 de la mañana del 23 de octubre. Desde ese momento, cualquier intento de comunicación ha sido en vano. Cuesta comparte su angustia y desesperación, relatando que la situación es inaudita, ya que siempre habían mantenido un contacto fluido.
Preocupada por la repentina interrupción en la comunicación, Shadia intentó obtener información del supervisor en la empresa donde trabajarían. Sin embargo, su búsqueda de respuestas se encontró con la frustración, ya que la empresa no ofreció informaciones concretas sobre el paradero de los dos hombres. “Nos hemos adherido a las políticas de Alfran, pero sinceramente no hemos recibido noticia alguna”, lamentaba Cuesta, quien ha buscado incansablemente respuestas sobre lo sucedido con su esposo y su compañero de trabajo.
Con el paso de los días, la situación se torna cada vez más desgarradora para las familias de Guerrero y Colón, quienes no sólo enfrentan la angustia por la desaparición de sus seres queridos, sino también la falta de transparencia y claridad por parte de la empresa en la que laboraban. Debido a la falta de información, las familias decidieron elevar su clamor pidiendo la ayuda de las autoridades colombianas para que se involucren en la investigación y búsqueda de los desaparecidos.
“Ayuda, lo único que estoy pidiendo es ayuda a las entidades pertinentes”, suplicó Cuesta, mientras la esperanza de recibir noticias comienza a desvanecerse. En medio de este doloroso episodio, la comunidad cartagenera se une al grito de sus familias, esperando que pronto pueda haber respuestas sobre la suerte de Cristian y Carlos.











