Son las novedades médicas y disciplinarias que acompañan a algunos jugadores de la Selección convocados por el profesor Nestor Lorenzo.
La situación disciplinaria de varios de sus jugadores clave muestran un panorama particular para la tricolor pensando en lo que será esta doble jornada eliminatoria.
Luis Díaz y Jhon Arias, dos de las principales figuras del equipo, están a una tarjeta amarilla de ser suspendidos, lo que los dejaría fuera del próximo partido contra Chile, el 15 de octubre en Barranquilla. Este factor podría influir en la estrategia de Lorenzo, quien debe evaluar si arriesgar a estos jugadores desde el inicio o darles minutos controlados para evitar una posible amonestación que afecte los planes a futuro.
Además de Díaz y Arias, otros tres jugadores importantes también corren el riesgo de perderse el próximo compromiso si son amonestados frente a Bolivia. Camilo Vargas, quien será el guardián del arco colombiano en este partido, deberá ser cauteloso para evitar una tarjeta amarilla que lo saque del crucial encuentro contra Chile.
Lo mismo ocurre con Luis Sinisterra y Jhon Córdoba, dos atacantes que pueden ser piezas fundamentales en el ataque colombiano, pero que deberán controlar su ímpetu para no comprometer su participación en la siguiente fecha de las Eliminatorias.
El partido de este jueves no solo representa un reto físico y táctico por la altitud, sino que también plantea una prueba de disciplina y control emocional para los jugadores colombianos. Néstor Lorenzo deberá gestionar estos factores con inteligencia para asegurar que su equipo no solo logre un resultado positivo en El Alto, sino que también llegue con todas sus figuras disponibles para el duelo contra Chile, que podría definir gran parte de las aspiraciones de Colombia en esta fase clasificatoria.