El balance lo entregó el comandante de la sexta brigada del Ejército, Carlos Eduardo Luque.
En Purificación, Prado, Planadas, Ortega, Piedras, Cunday y Natagaima, los valientes soldados del Ejército Nacional han combatido incendios forestales de gran magnitud de manera manual, demostrando su compromiso con la protección de la fauna y la flora.
Durante septiembre, Tolima experimentó unas de las temperaturas más altas, lo que llevó a que el Batallón de Ingenieros de Atención y Prevención de Desastres N.º 80, en colaboración con la Sexta Brigada del Ejército Nacional, intervinieron para controlar las llamas que afectaron más de 7,000 hectáreas en cinco municipios severamente impactados por los incendios.
Uno de los primeros focos de incendio fue en la frontera entre Prado y Purificación, donde los soldados lograron controlar manualmente 1,500 hectáreas usando batefuegos y rociadores. Esta labor se realizó en conjunto con la Defensa Civil y los Bomberos en tierra, así como con el apoyo aéreo de la Fuerza Aérea a través del Bambi Bucket.
Posteriormente, se trasladaron al municipio de Ortega. Allí, junto a soldados del Batallón de Infantería N.º 17 General Domingo Caicedo, trabajaron manualmente para extinguir las llamas en 200 hectáreas.
En Planadas también se brindó apoyo por parte del Batallón de Operaciones Terrestres N.º 18, donde se atendieron incendios en 17 veredas, controlando un total de 163 hectáreas.
El municipio de Piedras fue otro lugar afectado por el fuego. Con temperaturas que alcanzaron los 35 grados, un incendio duró varios días; aquí los soldados colaboraron con el cuerpo oficial de Bomberos para controlar 400 hectáreas.
En la zona alta de Cunday, gracias al respaldo aéreo y a la seguridad proporcionada por el Batallón de Infantería N.º 18 Coronel Jaime Rooke, se intervinieron 1,000 hectáreas montañosas para controlar el incendio.
Natagaima fue uno de los municipios que requirió mayor atención. Durante dos semanas, los soldados del Batallón de Ingenieros N.º 80 y del Batallón de Operaciones Terrestres N.º 17 trabajaron en 10 veredas y cinco resguardos afectados por el fuego. Lamentablemente, una vivienda fue destruida y otra dañada; además, tres acueductos veredales sufrieron pérdidas totales. A pesar de que las llamas consumieron más de 16,000 hectáreas, gracias a la pronta intervención de ingenieros forestales se logró controlar 4,500 hectáreas.
Además del control del fuego, la Sexta Brigada envió un carrotanque del Batallón de Apoyos y Servicios para proporcionar agua a varias familias en Coyaima que sufrían por las altas temperaturas. En Natagaima también se entregó ayuda humanitaria a los afectados por los incendios.
Una vez más, nuestros soldados del Ejército Nacional han demostrado su capacidad y compromiso para proteger la vida y nuestro ecosistema a través de estas acciones solidarias.