Superado el triunfo contra Paraguay, ahora la tricolor piensa en Costa Rica.
Ya llega la segunda fecha de la fase de grupos y la tricolor ya piensa en su siguiente rival, sin dejar de lado los errores cometidos durante el debut, los aspectos a mejorar y a mantener para conservar un buen juego y seguir pensando en la siguiente fase de la Copa América 2024.
Néstor Lorenzo tiene ahora el desafío de corregir ciertos aspectos del juego de su equipo, lo cual siempre es más fácil tras una victoria. La Selección debe buscar alternativas para contrarrestar las marcas férreas que, como hizo Paraguay, intentan neutralizar a su estrella Luis Díaz. En esta ocasión, Díaz no pudo brillar como en otros partidos, siendo claramente una de las prioridades del sistema defensivo rival.
Otro aspecto a trabajar es la precisión en la entrega del balón. Varias imprecisiones permitieron a Paraguay fortalecerse y conseguir el descuento a través de Julio Enciso. La mejora en la distribución será crucial en los próximos enfrentamientos.
Un capítulo aparte merece James Rodríguez, quien sigue siendo el faro de la Selección. A pesar de su falta de velocidad, su calidad y visión de juego le permiten poner el balón en el lugar correcto para sus compañeros. Fue el jugador más efectivo de Colombia en el campo, demostrando que su experiencia sigue siendo invaluable.
Por su parte, Rafael Santos Borré realizó un despliegue físico impresionante, cumpliendo un papel táctico sin balón que generó oportunidades para los demás jugadores de Colombia. Su esfuerzo y compromiso fueron vitales para la estructura del equipo.
También destacó el antioqueño Richard Ríos, quien tuvo un desempeño sobresaliente. Ríos no solo quitó balones, sino que los transportó con eficacia, permitiendo a sus compañeros tomar un nuevo aire y colaborando en ataque. Su trabajo abarcó ambas áreas, mostrando una gran versatilidad.
La tarea para Colombia es la de mostrar mayor continuidad en su juego en los próximos partidos contra Costa Rica y Brasil. El equipo ha empezado algunos partidos desconectados, cediendo la iniciativa al rival y tardando en reaccionar, como sucedió ante Paraguay, que dominó en los inicios de ambos tiempos.