En el norte del Cauca, los enfrentamientos entre el Ejército Nacional y el EMC de las Farc han dejado a más de 2 mil personas confinadas y a una comunera herida, según informó el Tejido de Defensa de la Vida.
Las confrontaciones, que se han intensificado en los territorios indígenas de Huellas y Tacueyó, afectan a las veredas El Credo, La María y El Damián, situadas entre los municipios de Toribío y Caloto. La comunidad denuncia el uso de explosivos cerca de viviendas e instituciones educativas, poniendo en grave riesgo a la población civil.
Angie Zapata, coordinadora del Tejido de Defensa de la Vida de la Asociación de Cabildos Indígenas del Norte del Cauca (Acín), reportó que una bala perdida hirió a una comunera de 31 años en la vereda El Damián. La víctima fue trasladada a un hospital de mayor complejidad debido a la gravedad de sus heridas.
Las autoridades ancestrales y la comunidad exigen respeto por el Derecho Internacional Humanitario y la protección de la población civil. Este incidente se suma a una serie de combates en la región que han provocado el desplazamiento de más de 500 personas.