Según el Ricardo Orozco, en el sur del Tolima pese al cese al fuego se siguen recibiendo quejas de amenazas y extorsiones a la comunidad.
El Gobernador del Tolima, Ricardo Orozco, ha expresado fuertes críticas ante la situación de seguridad en el sur del Tolima, a pesar del cese al fuego vigente. Según Orozco, la comunidad continúa enfrentando amenazas y extorsiones por parte de grupos armados en la región.
Este cese al fuego fue firmado entre el Gobierno Nacional y las FARC a nivel nacional, y cancela las operaciones en contra de estos grupos armados organizados hasta enero del 2024. En respuesta, el Gobernador del Tolima ha manifestado su punto de vista sobre el asunto.
Ricardo Orozco ha subrayado que, aunque el país anhela la paz en su territorio, estos decretos de cese al fuego deberían establecerse en un marco de igualdad. «La fuerza pública debe cesar todas sus operaciones, y las FARC o el ELN también deben poner fin a sus actividades delictivas», afirmó el Gobernador.
Además, ha destacado que es una decisión arriesgada por parte del Gobierno Nacional confiar en estos grupos armados, dado que podrían continuar con sus actividades criminales sin respetar los acuerdos de cese al fuego. «Esto no constituye un proceso de paz, sino simplemente un nuevo ‘Caguán’ enmascarado bajo un decreto presidencial», expresó con contundencia Ricardo Orozco.
Finalmente, el Gobernador ha instado a que estos acuerdos se realicen a través de mesas de diálogo en un contexto de un cese al fuego genuino. Esto cobra especial relevancia dado que, a pesar de la entrada en vigor de este acuerdo, en el sur del departamento del Tolima continúan registrándose operaciones que aparentemente podrían ser atribuidas a disidencias de las FARC.
«Hoy, en el sur del Tolima, a pesar de lo que ocurre, seguimos recibiendo quejas de extorsiones y amenazas. Bajo estas condiciones, el país nunca logrará alcanzar un verdadero proceso de paz», concluyó Orozco.