La ciudadanía se volcó a las calles para exigir que los empresarios de busetas regresen a prestar el servicio y dejen de afectar a la ciudadanía y pidieron a la alcaldía que logre acuerdos para finalizar el cese de actividades.
Los ciudadanos respondieron al llamado de los diferentes sectores para expresar su inconformismo por el cese de actividades de las empresas de transporte público y masivamente se volcaron al centro de Ibagué para reclamar por la finalización del cese de actividades.
Con pancartas, pitos, cornetas y todo lo que encontraron en sus casas se tomaron el centro y dieron a conocer su preocupación por lo que están viviendo sin servicio de transporte en las calles y reclamaron la terminación del paro.
Algunos de los asistentes dijeron que el ciudadano de a pie está reventado porque están pagando un precio demasiado alto para seguir con sus actividades.
“Es que no hay nada bueno, la gente no se puede desplazar, no puede ir a hacer sus vueltas, ir al médico. Son $20.000 en taxi de donde yo vivo a donde trabajo y otros 13 mil pesos de regreso, no hay plata de alcance, somos ciudadanos de a pie, que ganamos un mínimo, que se pongan la mano en el corazón y piensen en nosotros”, indicó una de las asistentes a la protesta.
Los comerciantes del centro también aprovecharon para pedir a las partes en conflicto con el cese de actividades, que se sienten a negociar porque quienes están pagando los platos rotos de este conflicto por la implementación del sistema estratégico de transporte público en Ibagué, son los ciudadanos.
“Ha rebajado mucho el trabajo, obviamente, la gente no sale entonces, los afectados somos los comerciantes. Son un 50% de lo que ganábamos anteriormente, ojalá arreglen eso porque los afectados no son ellos, somos nosotros”, aseveró un comerciante.
La comunidad espera ahora que tanto la Alcaldía como las empresas transportadoras lleguen a un acuerdo para poner fin al cese de actividades.