El semestre A del 2023 resultó ser una verdadera tortura para los hinchas del equipo ibaguereño, que vieron como su equipo termina apeado, por segunda vez consecutiva, de los 8 mejores de la Liga.
Nueve empates, 5 victorias y 6 derrotas, fue el balance de la deficiente aparición del cuadro tolimense, que jamás pudo hilar una seguidilla de triunfos y mucho menos un rendimiento que lo llevara a ellas.
El cambio de técnico, deja a Cruz Real, sin derrotas aún, pero con poco que celebrar, pues, el equipo mostró una bipolaridad que lo llevó a caerse en los segundos tiempos y regalara la posibilidad de los triunfos.
Solo 26 puntos y una triste cara para los hinchas que, vieron con dolor la actitud de algunos jugadores trotones, con declaraciones desafortunadas en el Twitter y sus estados de redes, abriendo la senda de su salida, con pocas ganas de ganar y muy poco pundonor deportivo, expulsiones infantiles y errores groseros; que a la larga duelen más que la eliminación, la falta de amor por la camiseta es lo que reclama el hincha.
“El que no quiera jugar, que se quite la camiseta y se la entregue a la hinchada, que se vaya de una vez y que no sufra más”. Fue el canto de la tribuna sur que con dolor salía de las gargantas de los aficionados.