Para el próximo lunes 4 de marzo la directora de Cortolima Olga Lucia Alfonso Iannini se reunirá con la alcaldesa de Ibagué Johana Aranda para conversar sobre estos y otros temas de gran importancia para la capital.
La directora General de Cortolima, Olga Lucía Alfonso Iannini, se refirió sobre la situación de agua para Ibagué, en torno a la quebrada Corazón, drenaje directo de la cuenca del río Combeima (subzona hidrográfica del río Coello).
Al respecto, aseguró que el IBAL tiene asignado por diferentes concesiones de agua un caudal de 3.309 litros por segundo, con lo cual podría suministrar agua a más de 1’400.000 habitantes, e Ibagué tiene aproximadamente una población de 600 mil personas y la proyección del DANE dice que para el año 2052 serán alrededor de 1’125.742, es decir que el agua con la que actualmente cuenta la ciudad es suficiente para abastecer del servicio a los ciudadanos presentes y futuros.
La directora de Cortolima resaltó que el análisis realizado al trámite solicitado por el IBAL se fundamentó en un condicionamiento técnico extraído de la Evaluación Regional del Agua (ERA-2022), el cual permitió conocer la oferta hídrica superficial disponible para la quebrada Corazón (drenaje directo del río Combeima).
Es importante resaltar que hasta la fecha no hay ningún trámite radicado por parte del IBAL en el cual se solicite concesiones de agua respecto de la quebrada Corazón. De presentarse alguna solicitud por parte de la empresa de servicios públicos de Ibagué, se revisará técnica y jurídicamente de acuerdo al caudal que sea solicitado.
Finalmente, Alfonso Iannini asegura que la solución a la problemática de agua en Ibagué va más allá de la captación se deben resolver las pérdidas de agua potable que de una u otra manera afectan el servicio de agua para la ciudad de Ibagué en lo que corresponde a la oferta hídrica que maneja el sistema hidráulico del IBAL.
En una operación óptima y adecuada el IBAL tendría agua suficiente para ofrecer un buen servicio a los ibaguereños. “Es una decisión técnica con un análisis técnico y jurídico y estoy segura que cualquier director hubiera tomado esta decisión”, puntualizó la directora de Cortolima.